Los directivos de AOCA consideran que “la
Cámara Argentina de Turismo, CAT, es la única referente en materia de turismo”
y que la renuncia contribuirá a limitar lo que definen como “intrusismo
institucional” de la gran confederación
La Asociación Argentina de Organizadores y
Proveedores de Exposiciones, Congresos y Eventos (AOCA), presentó
formalmente su renuncia a la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) por
considerar que su proyecto de crear Sectores de Turismo en las entidades
provinciales sobrepasa los límites de su competencia institucional.
En un carta dirigida al titular de la CAME, Osvaldo Cornide, los
dirigentes de AOCA sostienen que esa iniciativa “colisiona con la razón de
ser de las Cámaras de Turismo provinciales, que fuertemente ha impulsado y
concretado la conducción de la Cámara Argentina de Turismo (CAT)”.
La retirada –sostienen– se da “en mérito a una imprescindible claridad en
las competencias y ámbito institucional de cada entidad y, siendo la CAT la
única referente en materia de Turismo, estimamos que nuestra renuncia
contribuirá a estos objetivos”.
AOCA, una entidad especializada en ferias,
exposiciones, congresos y convenciones, y en turismo de reuniones, creada en
diciembre 1983 con alrededor de 140 socios actuales, objetó un documento de la
CAME donde se señalaba que “La Confederación Argentina de la Mediana Empresa
(CAME) es una gran entidad que agrupa a 1.438 federaciones, cámaras, centros y
uniones de todo el país, representando a más de medio millón de empresas PYMES,
las que a su vez dan trabajo a más de 1.300.000 personas.
Entre sus objetivos se destaca el
desarrollo económico regional involucrando a la Industria, el Comercio y el
Turismo, la Producción, a los Jóvenes Empresarios, como así también a las
Mujeres CAME”.
La retirada de AOCA de la Confederación
Argentina de la Mediana Empresa, entidad creada hace 57 años, recibió la
siguiente respuesta de parte de esa entidad presidida por Osvaldo Cornide, con
la firma de éste y de José Bereciartúa, secretario general de la confederación:
“De nuestra consideración:
Por medio de la presente nos dirigimos a
usted en relación con la renuncia de la Asociación Argentina de
Organizadores y Proveedores de Exposiciones y Congresos (AOCA) a la
membresía de pertenencia a la Confederación Argentina de la Mediana
Empresa (CAME).
Atento a lo expuesto por usted en
referencia al ámbito de actuación de la Cámara Argentina de Turismo (CAT),
informamos que la CAME tiene un acuerdo de complementación con la CAT en
el cual manifestamos que no somos una entidad del Turismo y que en todos
los foros y encuentros actuamos de común acuerdo.
Un ejemplo de lo antedicho es el XII Foro
Internacional de Turismo, Ciudad y Comercio, celebrado en junio pasado en
Potrero de los Funes (San Luis) ante la presencia de más de 750 dirigentes
empresarios, representantes de las 24 provincias argentinas. En este
evento organizado por nuestra entidad brindaron sus palabras el ministro
de Turismo de la Nación, Enrique Meyer y el presidente de la Cámara Argentina
de Turismo, Oscar Ghezzi.
La directiva dada con respecto al Turismo
consiste en crear comisiones de promoción turística en las regiones y
ciudades a fin de colaborar con la CAT y con la CAME.
Esperamos haber aclarado el malentendido y consideramos que si AOCA quiere
pertenecer o renunciar a esta Confederación, tiene toda la libertad de
hacerlo.
Oscar Ghezzi, presidente de la Cámara
Argentina de Turismo, se mostró en desacuerdo con el anteproyecto pero reafirmó
el convenio con la CAME: “Cada una de las entidades conoce su rol porque si se
mezclan las funciones se interferirían y entorpecerían la acción de una sobre
la otra. Estoy convencido de que para la CAT el turismo es su misión, y para la
CAME es el comercio”.
Es contraproducente que mientras se hace
hincapié en la necesidad de sinergia entre el sector público y privado, o de
articular objetivos entre las instituciones y los actores empresarios, se haya
llegado a semejante cortocircuito entre dos entidades dinámicas y necesarias para
el impulso de la actividad, por confusas razones de “jurisdicción” o
“incumbencias”. Esperemos que ambos importantes actores de la productividad
puedan llegar a un acuerdo, para bien de sus socios y de todo el sector.